Es recomendable lo que sea cómodo para ti. Recientemente se ha publicado un estudio que compara la copa menstrual con tampones y compresas y concluye que las tres opciones son igualmente seguras y eficaces, de modo que solamente te queda pensar si te convence o no; para ayudarte en la decisión hemos hecho un pequeño resumen con sus pros y contras:
Ventajas:
1) Más económico: hay copas de distintos precios pero generalmente están entre 16 y 30 euros y, en función de la marca y de cómo la cuides, puede durarte de dos a diez años. Teniendo en cuenta el precio de tampones/compresas, lo habitual es que en unos tres ciclos hayas amortizado el precio de la copa.
2) Más ecológico: durante el tiempo que utilices la copa estarás evitando los residuos que crean tampones y compresas usados, así como los envoltorios de los mismos. Al cabo de los años esto supone una cantidad de plásticos y de residuos no reciclables muy considerable.
3) Menos cambios: la capacidad de la copa es mucho mayor que la de tampones y compresas (de media la capacidad de la copa sería similar a la de tres tampones), por lo que necesitarás cambiarte muchas menos veces. Si tus reglas no son abundantes puede ser suficiente con ponértela por la mañana y cambiarla antes de irte a dormir.
4) Más comodidad para reglas abundantes…y también para sangrados escasos: como decíamos, al tener más capacidad no necesitas cambiarte tantas veces. Por otro lado te permite también estar cubierta los últimos (o primeros) días de regla, cuando el sangrado es tan escaso que el uso de un tampón puede resultar molesto.
5) Más respetuoso con las condiciones fisiológicas de la vagina: la función de los tampones es absorber los líquidos que se encuentra, sea sangre (bien) o sean secreciones normales de la mucosa vaginal (no tan bien). Esto puede hacer que notes cierta sensación de sequedad vaginal con su uso. Las copas menstruales están fabricadas en general con silicona o TPE (elastómeros termoplásticos), que no son absorbentes sino que funcionan tan solo como contenedores del sangrado menstrual evitando así este efecto indeseable.
6) Te permite aprender sobre tu propio cuerpo: necesitarás aprender a ubicar tu cérvix y a conocer la disposición del mismo y de tu vagina. Además comprobarás cuánto sangras realmente durante la regla (es difícil hacer una estimación real en mililitros con tampones/compresas).
Desventajas:
1) Requiere un tiempo de aprendizaje: esta es probablemente la principal desventaja. Es muy improbable que consigas colocar y retirar la copa con facilidad en tu primer ciclo (o en el segundo). Una vez controlada te resultará sencillo hacerlo en cualquier situación pero mientras tanto lo habitual es que necesites unos cuantos minutos de tranquilidad a solas en tu baño tanto para introducirla como para extraerla.
2) Es probable que necesites probar dos o tres modelos distintos antes de encontrar el que te va bien: hay muchísimas marcas de copas, cada una con sus peculiaridades en forma, tamaño, firmeza y textura. Hay afortunadas que dan con su modelo ideal a la primera pero es frecuente que tengas que tantear un poco. También puede ser que acabes utilizando dos durante cada regla, dependiendo de la altura del cérvix y la cantidad de sangrado que vayas teniendo en cada momento del ciclo.